1. Ten en cuenta tus gustos y preferencias, si te interesa más aprender de la cultura del lugar y estár más al aire libre, o si, por el contrario, prefieres los lujos y las comodidades. De ahí que puedes escoger mejor el destino.
2. La compañía. Nunca es bueno viajar solo, pero el tipo de personas que te acompañen influirán en el curso de tu viaje, por ejemplo, los niños y las personas mayores en ocasiones obstaculizan algunas actividades, como aventura arriesgada; si por el contrario quieres pasar un buen tiempo en familia, los niños tendrán buenos recuerdos del viaje igual que tu.
3. El presupuesto. Tener claro el dinero presupuestado para cada aspecto del viaje y no transgredir el mismo; también asegurarse de no pasar por alto ningún tipo de gasto mientras haces su estimación: la estadía, los pasajes, la alimentación, etc. Así, si tienes bien las cuentas, no habrán sorpresas ni contratiempos en el viaje.
4. En lo posible, y sobretodo por la época contemporánea del apogeo de la tecnología, desconectarse de esta, es decir, no dejar que la tecnología siga ocupando un primer plano en nuestra rutina. La esencia de un viaje, es cambiar de entorno, conocer y aprender del lugar, pasar tiempo de verdad junto a las personas que quieres, conectarte contigo mismo y disfrutar más de lugares nuevos.
5. Por último, te recomendaré viajar, en lo posible, con una cámara. Las memorias plasmadas con la tinta de una fotografía son más duraderas que las del cerebro, expuestas al olvido con todo lo otro que tenemos en qué pensar.
![]() |
Imagen tomada de Pinterest |
No hay comentarios.:
Publicar un comentario